miércoles, 30 de octubre de 2013

Ciencia / Tecnología / Burguesía Nacional


Ciencia / Tecnología / Burguesía Nacional
En distintas oportunidades hemos manifestado que uno de los ejes principales de las políticas a implementar en Ciencia y Tecnología deberían estar direccionados desde el Estado y canalizados a través del desarrollo de proyectos que atiendan necesidades públicas. Sean éstas estratégicas, sociales o económicas, y de cualquier ámbito (nacional, provincial  o municipal).  

Sin embargo, las políticas aplicadas en los últimos años han sido, esencialmente, orientadas a apoyar al sector privado, aunque éste no ha dado las respuestas esperadas. En efecto, durante el período de mayor crecimiento de la economía en la historia de nuestro país (2003-2012), la inversión del sector privado en CyT se ha mantenido constante en alrededor del 30% de la inversión total. Pero, a pesar de ello, se sigue insistiendo. Veamos algunos datos. 

El texto del Plan de CyT 2006-2010 "Bicentenario" decía que partiendo de la base del 30% de inversión privada en CyT en el año 2004, se preveían inversiones privadas progresivas que iban a ir del 35% en 2005 hasta llegar al 50% en 2010" (pág.12 de la versión electrónica del Plan).

Sin embargo, esto no se cumplió por parte del sector privado, hecho que se reconoce en la introducción del Plan de CyT 2012-2015 cuando dice: "Dentro de esa dinámica de inversión, poco más de dos tercios (70%) corresponden al aporte del sector público, ya sea a través del gobierno nacional y los provinciales o de las universidades nacionales, lo que evidencia la dificultad de revertir la baja participación de los fondos privados que caracteriza al sistema argentino de ciencia y tecnología" (pág.29, versión electrónica). Sintetizando, continuó el 30 % de inversión privada.      
Pero, a pesar de venir tropezando con la misma piedra desde hace años, se sigue insistiendo. Así, en el último Plan de CyT (marzo de 2013) denominado "Argentina Innovadora 2020" se continúa apelando, inexplicablemente, al sector privado para que articule con el sector público para el desarrollo de sus proyectos. Así, ahora en el Plan "Argentina  Innovadora 2020" se estima que el 50% de inversión será privada para 2020 (Pág.40, cuadro, versión electrónica). 

Sintetizando, en el Plan "Argentina Innovadora 2020" se plantea -en relación al sector privado- lo mismo que en el Plan 2006-2010. En efecto, en el Plan 2006-2010 el objetivo era alcanzar un inversión del 50% en ese sector para el año 2010. Ahora, en "Argentina Innovadora 2020" el objetivo también es alcanzar ese 50%, pero ahora para el año 2020. Brevemente, un fracaso atribuible a que se apoyaron en un sector que no movió el amperímetro de la inversión en diez años. 

Incluso más allá de lo ideológico, sólo con una mirada pragmática, es difícil comprender por qué se sigue apoyando a quienes los defraudaron. Porque si no han invertido en el marco del crecimiento de los últimos diez años, ¡¡¡ cuándo van a invertir !!!. Por lo menos, sería necesario una explicación.

Por otra parte, este comportamiento de la "burguesía nacional" no es sólo en el sector CyT, sino que lo podemos trasladar a otros ámbitos. Para ello, recurrimos a algunos fragmentos del artículo "El mito de la burguesía nacional ", del economista y periodista Claudio Scaletta. Veamos:

"Los empresarios pueden continuar ganando dinero aunque la economía no crezca y no se desarrolle, lo que constituye un verdadero problema desde la perspectiva del bienestar de las mayorías. En la historia económica sobran los ejemplos. Sin ir más lejos, la propia Argentina. El tema no es nuevo y ya fue tratado, por ejemplo, por el economista polaco Michal Kalecki en su texto de 1943 Aspectos políticos del pleno empleo, en el que describía cómo la baja desocupación cambiaba las relaciones de poder en desmedro de los empleadores. La conclusión, inclusive sin recurrir a Kalecki, cae por su propio peso. El desarrollo es algo demasiado importante para dejarlo en manos de los empresarios. Los países que lograron desarrollarse en las últimas décadas, empezando por China, no lo hicieron gracias al libre mercado, sino de la mano de una decidida planificación y con el Estado controlando sectores clave de la economía". Artículo completo en: http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/cash/33-7183-2013-10-25.html.
También puede contribuir a formarnos una opinión el artículo "El Mensaje", del economista/ periodista Alfredo Zaiat, quien observa la nacionalización parcial de YPF como una consecuencia del fracaso del plan de generar un capitalismo nacional, apoyándose en el empresariado "nacional", y el papel que debería jugar el Estado en esas circunstancias. El artículo es del 06-05-12. Veamos algunos fragmentos:

"Se facilitó el desembarco de empresarios nacionales en compañías privatizadas en manos de extranjeros. El ingreso del grupo Eskenazi en YPF fue el último gran intento de ese plan. La constante fuga de capitales, la acumulación de abultadas ganancias, la morosidad en las decisiones de inversión y la persistencia de conductas rentísticas de esa burguesía mostraron la limitación de esa estrategia.
En esa evolución, si una facción de la burguesía nacional se revela fallida, ya sea porque invierte poco, se asocia con el grupo extranjero en la predación de recursos hidrocarburíferos, fuga capitales, especula contra el peso comprando dólares en cantidad o distribuye dividendos en vez de emprender planes de expansión productiva, el Estado enfrenta el desafío de asumir un rol activo en sectores productivos clave de la economía para sostener el ritmo de crecimiento y creación de empleo. Es lo que pasó con Repsol en el mercado de hidrocarburos.
Con una burguesía sin liderazgo, el gobierno de CFK deriva necesariamente en el mensaje de que se tienen que dar cuenta de que el camino para que el capitalismo sea sostenible es con un Estado presente, definiendo regulaciones, exigiendo al sector privado, estableciendo objetivos y controlando que se cumplan. Es lo que se conoce como disciplinamiento de las elites, para desplazar al capitalismo rentístico, débil y protagonista destacado de pasadas crisis económicas". Artículo completo ver en: http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-193424-2012-05-06.html.

En fin, las cosas están claras. Por eso, los ejes rectores de las políticas públicas en CyT no deberían sustentarse sobre la base de lógicas empresarias privadas. Lo razonable sería orientarlas, principalmente, a resolver problemáticas públicas, como se fundamenta en el documento de la Comisión de Políticas en CyT de la Multisectorial "Políticas en Ciencia y Tecnología 2003-2012" - Fortalezas / Debilidades / Propuestas.
Interesados en este documento enviar un mail a: grupogestion1@yahoo.com.ar. En Asunto poner: SOLICITO POLÍTICAS CyT y les será remitido.

Grupo de Gestión: Alonso-Romanowski S - Cid JA - Cravero C - De Filippo J - De Sousa Frade S - Fiamberti H - Furnari JC - García AP - Giordano M - Gubertini MT - Hermida EB - Herrera M - Ielpi L - Iriondo M - Isturiz MA - Lamberti Y - Landoni MF- Lemos DR  - Massarini A - Milana JP - Nonzioli AC - Otero AM - Palermo M - Pérez O - Ravelo A - Rearte B - Recavarren MI - Rietti S - Rivero S - Rofman A - Sabbatini ME - Sasiain MC - Schattner M - Yokobori N.

Este texto se difunde a: Presidencia de la Nación, Jefatura de Gabinete, Ministerios de Educación, Salud, Defensa, Cancillería, Ciencia y Tecnología, Ministerios de Salud Provinciales, ANMAT, Diputados y Senadores Nacionales, Legisladores y Funcionarios Provinciales y C.A.B.A., Academias Nacionales, Instituciones del Sector CyT (INTA, INTI, CNEA, CONICET, SEGEMAR, CONAE, CITEFA, INIDEP, SENASA, INA, ANLIS-Malbrán, UTN), Facultades de Universidades Nacionales, ONG, Laboratorios de PPMV, etc).