lunes, 30 de agosto de 2010

¿ Qué le pasa al mundo científico-tecnológico ?

¿Qué le pasa al mundo académico, científico y tecnológico?

Esa es la pregunta que se formula el sociólogo Carlos Girotti en un artículo reciente. Como el mismo nos pareció muy esclarecedor sobre diversos aspectos que hacen al quehacer científico/ tecnológico, previo consentimiento del autor, lo difundimos.

A continuación, el artículo:

GLIFOSATO: UNA CIENCIA SIN CIUDADANÍA

Por Carlos Girotti (*) -negritas nuestras-

La portada de Página/12 de ayer (1) no deja lugar a dudas: una revista científica norteamericana publicó el trabajo del argentino Andrés Carrasco y, al hacerlo, validó sus severas advertencias sobre la exposición de humanos al glifosato, el herbicida asociado al cultivo intensivo de la soja. Pero la nota de tapa del matutino también interpela a todos los integrantes del sector científico y tecnológico nacional: ¿acaso estaban esperando la publicación extranjera para actuar en consecuencia? ¿ necesitaban de eso para ir contra Monsanto porque los testimonios de labradores y pequeños campesinos afectados por el herbicida no eran suficientemente serios?.

Andrés Carrasco es director del Laboratorio de Embriología Molecular de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires y ex Presidente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) durante el gobierno de la Alianza. Se trata de un científico que, quizás cuando fue muchacho, habrá cruzado un par de piñas en el potrero del barrio, pero que ahora en los puños sólo lleva denuncias por las cuales, recientemente, una patota lo agredió a trompadas en el Chaco.

Todo eso, e incluso buena parte de sus advertencias sobre las graves consecuencias que trae el uso del glifosato para la salud humana, han sido recogidos por la prensa. Sin embargo, ninguna autoridad ha dicho esta boca es mía, salvo el intendente de la localidad chaqueña de La Leonesa que fue quien comandó la agresión contra el investigador del Conicet. Tampoco las sociedades científicas, los colegios profesionales, las revistas de divulgación han mostrado preocupación ni indignación, excepción hecha de algunas manifestaciones solidarias y firmas en blogs y solicitadas que, por suerte, nunca faltan.

¿Qué le pasa al mundo académico, científico y tecnológico? ¿Qué ocurre con las autoridades sectoriales, con el Ministerio del ramo, con el Conicet? Aun en la suposición de que Carrasco estuviera equivocado, o de que sus trabajos carecieran de fundamentos, lo menos que se podría haber hecho es solidarizarse inequívocamente con él tras las agresiones sufridas. Ahora lloverán las solidaridades, pero porque -tal como lo indican las normas establecidas para la evaluación científica- el trabajo de Carrasco fue publicado por una prestigiosa revista, lo que significa que su comunicación ha sido convalidada por otros científicos que actúan como referís. El famoso juicio de pares. Faltaba eso, el juicio de pares, para que cualquier integrante del sector científico y tecnológico diera crédito a las advertencias de Carrasco o, como mínimo, que se sintiera autorizado a preguntarse sobre los alcances del modelo sojero (o minero cuando se vean los desastres producidos por el cianuro).

El escritor Mempo Giardinelli, el economista y director del BAE, Aldo Ferrer, y Enrique Martínez, Presidente del INTI, no necesitaron ser “emprendedores sojeros” para polemizar públicamente con Gustavo Grobocopatel, astuto defensor del paraíso político, económico y social que crece junto con el poroto de soja. Es decir, no necesitaron ser pares de Grobocopatel para cuestionar el modelo que éste apuntala con todo su savoir-faire de emprendedor hipermoderno y fino intelectual orgánico de los pools de siembra. ¿Qué precisan los científicos y tecnólogos argentinos para hacerlo? ¿Un paper validado por el comité de redacción de una revista especializada y, sobre todo, extranjera?.

El mundo argentino de la ciencia y la tecnología carece de los reflejos imprescindibles para interpelarse -e interpelar a la sociedad y al Estado- sobre los alcances de un modelo de desarrollo que, en la práctica, contabiliza a ambas actividades como socios concurrentes pero silenciosos. Y no es sólo con la soja o la minería a cielo abierto. Hay un silencio de estrépito en tópicos inexcusables que hacen a la salud pública, como la producción pública de medicamentos, salud reproductiva y materno infantil, la despenalización del aborto, las enfermedades de la pobreza y tantos otros.

Es como si la comunidad científica no tuviera otra obligación que no fuese la de responder, en tiempo y forma, a la requisitoria de informes periódicos para la evaluación de sus actividades, a llenar formularios para presentarse a la operatoria de subsidios financiados con la deuda externa que se contrae con el BID, a concurrir a congresos y a publicar en revistas especializadas. Ni siquiera cuenta la importancia de preguntarse por qué razón los 15.000 investigadores, profesionales, técnicos y becarios del CONICET no tienen paritarias, aunque en la Casa de Gobierno haya -por primera vez en la historia- un salón dedicado a sus figuras más relevantes y, también por vez primera, haya un Ministerio para el sector.

No es que nunca se registraron reivindicaciones y luchas sectoriales. Aún hoy se cuentan honrosas excepciones que recogen con dignidad la memoria de los científicos desaparecidos bajo la dictadura militar, el enfrentamiento al oscurantismo, a los experimentos clandestinos con virus recombinantes y a los afanes privatizadores de la época menemista y del plan del Banco Mundial, al conservadurismo de hoy y de siempre que les niega a los becarios su condición laboral de investigadores en formación, al cientificismo que justifica su razón de ser en la evaluación de pares, pero que en silencio abona un modelo productivista que jerarquiza los beneficios empresariales antes que la promoción y defensa del interés público.

Sin embargo, estas manifestaciones de rechazo quedan en el testimonio puntual y solitario, mientras una masa inerte de recursos altamente calificados y formados en las instituciones estatales espera a ser tocada por la varita mágica de un emprendimiento privado, o a ser captada por algún instituto extranjero de investigación. Este modelo de desarrollo científico y tecnológico no puede poner en cuestión aquello que, en definitiva, está como parte constitutiva de sus cimientos, esto es, la enajenación ciudadana del personal que lo conforma.

Para cambiar ese modelo es preciso que al menos una parte del personal científico y tecnológico comience a percibir que hay otros sectores de la sociedad que le demandan su propio protagonismo. En los últimos días, sin ir muy lejos, varias iniciativas dan cuenta del vacío que deja la comunidad científica al no interpelar, desde sus saberes específicos, un orden de cosas que merece ser modificado. El Espacio Carta Abierta, tan criticado por izquierda y derecha en su supuesto seguidismo a la agenda gubernamental (de hecho, Carrasco lo critica por izquierda), organizó desde su Comisión de Mujeres un alegato frontal en favor de la despenalización del aborto y, luego, desde su 2° Foro de Salud, promovió un debate y una crítica a la injustificable demora oficial para ejecutar la producción pública de medicamentos.

A su turno, tres representantes de agencias de las Naciones Unidas le hicieron saber al gobierno su preocupación por el aumento de la tasa de mortalidad materna, en función de los abortos inseguros, lo cual resuena tanto en la inexplicable recusa del ministro del ramo a firmar la resolución que avale la guía para atender abortos legales, como en las críticas que el funcionario recibiera de parte de organizaciones de la sociedad civil vinculadas a los temas de género.

En pocas palabras: iniciativas sociales no faltan; lo que falta es que una parte de los científicos y tecnólogos las asuma como propias y, de este modo, resignifique también el sentido de su quehacer. No habrá un Nobel por ello: apenas la íntima convicción de contribuir, con modestia, a tener un país mejor.

(*) Sociólogo, Conicet - 18 agosto de 2010.

(1) se refiere a la nota “Deformaciones similares a las de embriones humanos”, del 17 de agosto de 2010. Ver en: http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-151480-2010-08-17.html.

lunes, 23 de agosto de 2010

Proy Ley/ C Abierta - Reflexiones/ Manzur

Audiencia Pública / Proyecto de Ley

El 12 de agosto de 2010 los diputados Eduardo Macaluse y Graciela Iturraspe (SÍ - Unidad Popular), Claudio Lozano (Buenos Aires para Todos), Mónica Fein (PS de Santa Fe) y Virginia Linares (GEN) convocaron a una Audiencia Pública en la Cámara de Diputados de la Nación para debatir sobre Producción Pública de Medicamentos (PPM).

El objetivo de la Audiencia Pública era informar/ intercambiar opiniones sobre distintos aspectos de la PPM y que, además, permitiera a los Diputados recabar información adicional para, eventualmente, complementar la propuesta de un Proyecto de Ley sobre PPM -originalmente presentado en el año 2002 por el diputado Eduardo Macaluse- luego re-presentado cada dos años.

También estuvo presente el Diputado Mario Martiarena (Peronismo Jujeño) que presentó un Proyecto en el año 2009 con el mismo fin, razón por la cual están trabajando sobre ambos proyectos (Macaluse/ Martiarena) para intentar unificarlos, en un marco en donde el medicamento sea considerado un bien social y la PPM un camino para que toda la población tenga accesibilidad a los mismos.

Luego de la presentación y fundamentación de la necesidad de una Ley de PPM por parte del diputado Macaluse, expusieron representantes de Laboratorios de PPM (LIF de Santa Fe, LEM de Rosario, Laboratorio de Hemoderivados de la Universidad Nacional de Córdoba y del Laboratorio de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata).

También hubo ponencias de representantes de la Cátedra de Salud y DDHH de la Facultad de Medicina -UBA-, de la Secretaría de DDHH de la CTA, del Grupo por el Uso Racional de Medicamentos -GAPURMED-, de la Secretaría de Extensión Universitaria de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP, de la coordinadora de la Red Nacional para la PPM (RELAP), de ex directivos de Laboratorios Públicos y de representantes del Grupo de Gestión. Además, participaron investigadores, expertos sanitaristas, trabajadores y usuarios del sistema público de Salud.

También estuvieron presentes referentes de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA-CTA), y de la mesa nacional de Salud de ATE-CTA.

En el encuentro se resaltó la importancia de la PPM para mejorar su accesibilidad, establecer la soberanía científico/técnica del país en el tema, desarrollar la capacidad instalada y regular los precios del mercado.

Se mencionó que Argentina ya cuenta con laboratorios y recursos humanos que están en condiciones de producir medicamentos.

Si bien en la actualidad es difícil precisar cuánto gasta el Estado en medicamentos, Macaluse aseguró que "en los registros que llegan hasta el año 2007/08 se gastan más de 10 mil millones de pesos anuales sin tener en cuenta los gastos hospitalarios ni el mercado de genéricos".

Más adelante darán a conocer la versión taquigráfica de lo expresado en la Audiencia Pública por los distintos expositores.

Nosotros, seguiremos la evolución de este Proyecto de Ley para la PPM.

CARTA ABIERTA

El 13 de agosto de 2010 se llevó a cabo en la Biblioteca Nacional el 2º FORO para la elaboración de POLÍTICAS PÚBLICAS de SALUD sobre el tema: Política de Medicamentos.

El mismo fue organizado por el espacio Carta Abierta con la decisión de incidir con fuerza en el debate político de cara al 2011.

Ahí se debatió la demanda pública de medicamentos, el estado de situación de los laboratorios de producción pública, las actividades de coordinación (existentes y potenciales) entre las distintas unidades de producción, las líneas productivas prioritarias y estratégicas y el mercado internacional de medicamentos. Límites y posibilidades. La concurrencia fue numerosa y contó con la presencia de muchos referentes en el tema.

Los expositores y temas tratados fueron:

Dr Francisco Leone: Sanitarista - Ex Coordinador del Programa Proaps-Remediar. Tema: “El rol del Estado en las políticas de medicamentos”

Dr Martín Isturiz: Investigador CONICET - Grupo de Gestión de Políticas de Estado en CyT. Tema: “Políticas de medicamentos desde la investigación”.

Dr Ricardo Martínez: Sanitarista - Ex Director/ Interventor de ANMAT. Tema: “Políticas de medicamentos. Importacia de un organismo estatal de regulación”.*
Dr Constantino Toulupas: Médico farmacólogo - Docente en farmacología aplicada. Tema: “Políticas de medicamentos desde la producción y el mercado”.

Ing Carlos Arques: Miembro del Directorio del LIF (Laboratorio Industrial Farmacéutico S.E, Santa Fe). Tema: “Políticas de medicamentos desde la producción pública”.

Más adelante, en la web de Carta Abierta (www.cartaabierta.org.ar), saldrá un resumen de la Reunión.

Por otra parte, en el curso de esta semana, Carta Abierta avanza a una nueva fase invitando a un primer encuentro a todos los panelistas del 1º y 2º Foro para discutir las grandes líneas de una posible propuesta de Salud. Un hecho alentador, sin dudas.

Reflexiones

Distintas expresiones del arco social y político (incluido el oficialismo) se vienen expresando acerca de la PPM. Veamos algunos casos.

- Una parte del espacio político partidario opositor reitera las viejas aspiraciones de llegar a tener una Ley para la PPM y ha incorporado a referentes de otros partidos políticos.

- Carta Abierta está organizando Foros acerca del tema Salud, que incluyen la PPM.

- La Resol 286/2008 del Ministerio de Salud dice que “la inaccesibilidad, la inequidad y el desabastecimiento de medicamentos y productos médicos merece un tratamiento estructural por parte del Gobierno. Corresponde dar un marco estratégico adecuado y formal a la PPMV y Productos Médicos”.

- Una clara señal política fue la reciente decisión de la Presidenta de la Nación al entregarle un subsidio al Instituto Biológico de La Plata que perimtirá producir 120 millones de comprimidos.

- También es clara la posición de la ministra de Defensa Nilda Garré, que le propuso al Ministerio de Salud incorporar los dos laboratorios de PPM de las FFAA a un proyecto que, además de proveer para las FFAA, permitiera incorporar a esos laboratorios a la Red Nacional de PPM (RELAP). Dicho proyecto fue acordado en el despacho y con la presencia de la Presidenta de La Nación.

- Tenemos registradas más de 200 organizaciones sociales/ académicas/ gremiales/ científicas/ otras, que han brindado apoyo a la Multisectorial para la PPM (67 organizaciones) y, dos años atrás, recibimos el apoyo de más de 3.000 personas, sólo de nuestro ámbito de difusión.

Conclusión: Es muy auspicioso que desde el más alto nivel del poder político y de distintos sectores del pensamiento nacional (políticos, gremiales, sociales, etc) haya posiciones coincidentes en cuanto a que la PPM es una necesidad social y estratégica.

Ministro Juan Manzur

En todo ese marco, lo que no entendemos es la posición del ministro de Salud Juan Manzur, porque siendo su ministerio el principal demandante de medicamentos para sostener los planes sociales en todo el país, debería ser el mayor interesado en estos temas. Sin embargo, curiosamente, no ha hecho nada al respecto.

En realidad, que no ha hecho nada, es un eufemismo porque luego de su asunción desafectó al coordinador del Remediar, descabezó la conducción de la ANMAT (presidencia y vice), no contestó a la propuesta de la Dra Garré, no continuó con el aprovisionamiento del Remediar por los Laboratorios de PPM y hasta sacó el Programa para PPM (Res.286/2008) de la página web del Ministerio de Salud, entre otras cosas.

Es difícil entender todo esto. Entonces, por lo menos, caben dos preguntas:

1.- ¿ Por dónde pasan las decisiones políticas ?.

2.- ¿ Conoce la Presidenta de la Nación el accionar del Dr Manzur, con respecto a la PPM ?

Suponemos que lo sabremos en el corto plazo. Y si no conseguimos información por parte de personas estrechamente ligadas al Gobierno, lo veremos en la evolución misma del proyecto de PPM.

martes, 10 de agosto de 2010

Carrasco - Eventos - Historia

Dr Andrés Carrasco

Es Investigador Principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y Profesor/ Director del Laboratorio de Embriología Molecular de la Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires.

Nos sumamos a otras organizaciones y personas para solidarizarnos con el Dr Carrasco y expresamos nuestro repudio por los hechos de violencia del sábado 7 de agosto de 2010 en la localidad de La Leonesa -Provincia. de Chaco-, como consecuencia de una charla que iba a dar sobre los efectos nocivos del glifosato, y otros agroquímicos.

Según información que poseemos, alrededor de 20 personas comenzaron a golpear a los vecinos que iban a asistir a la conferencia, resultando varios heridos, entre ellos, el diputado Martínez, de la provincia de Chaco. Además, hubo pedidos de presencia de la Gendarmería Nacional pues corría peligro la integridad física de los organizadores, los vecinos y del propio Carrasco. Hubo altas autoridades locales comprometidas en el hecho.

En lugar de manifestarse con actitudes patoteriles que sólo defienden intereses personales /sectoriales, sería interesante que alguna vez esa disconformidad no la expresaran desde la prepotencia, sino sobre la base de argumentos.

Por otra parte, ante hechos de esta naturaleza, sería importante que se expidieran, en principio del CONICET, al cual el Dr Carrasco pertenece, así como otros organismos, universidades y la comunidad en general.

Porque también es conocido, aunque tuvo escasa difusión, que algunas manos negras impidieron que el Dr Carrasco hablara en la reciente Feria del Libro. Nos preguntamos: ¿quién fue ? - ¿ por qué no quieren que hable ? - ¿ por qué no se identifican ?.

Además, las universidades deberían promover la discusión sobre el tema agroquímicos, en donde se pueda escuchar a diferentes expertos en un mismo panel. De un lado y del otro. Porque si hay voces disonantes con la posición que sostienen el Dr Carrasco y otros, bienvenidas, pero que se expresen en forma pública e identificable. Porque de esa discusión podrían surgir, además, recomendaciones a las autoridades competentes.

Eventos

- Jueves 12 de agosto - AUDIENCIA PÚBLICA

Los diputados Eduardo Macaluse y Graciela Iturraspe (SÍ-Unidad Popular), Claudio Lozano (Buenos Aires para Todos), Mónica Fein (PS de Santa Fe) y Virginia Linares (GEN) invitan a debatir sobre Producción Pública de Medicamentos.

14.30 a 19 hs, Piso 2º, Sala 1, Anexo del Congreso de la Nación, Rio Bamba 25, CABA.

- Viernes 13 de agosto - Espacio CARTA ABIERTA (www.cartaabierta.org.ar ).

2º FORO para la elaboración de Políticas Públicas de Salud: POLÍTICA de MEDICAMENTOS.

A las 17:45 hs - Biblioteca Nacional / Sala J.L. Borges.

Más detalles sobre los eventos en: http://grupogestionpoliticas.blogspot.com/2010/08/carta-abierta-audiencia-raro-h-berretta.html .

Un poco de Historia de la Ciencia

Luego de participar en el Congreso del Bicentenario organizado por la Universidad Nacional de Córdoba, desde la Secretaría de CyT de esa universidad le hicieron una nota al físico e historiador de la Ciencia, Dr Diego Hurtado de Mendoza.

Creímos importante difundir algunos fragmentos de la entrevista al Dr Hurtado de Mendoza porque nos permite ver algunas de las cosas que nos pasan, como la dependencia cultural o la fragmentación institucional, entre otras.

La nota es del 4 de junio de 2010 y giró en torno a los inicios de la ciencia en la Argentina: ¿Qué rol jugó la ciencia en la formación del Estado nacional? ¿En qué proyecto de nación se insertó la producción de conocimiento científico? ¿Cuáles fueron las políticas científicas que se aplicaron en estos 200 años? ¿Hacia dónde deben dirigirse las políticas científicas en Argentina?.

Por razones técnicas, sólo transcribimos una parte de la entrevista que va desde la época de Sarmiento en adelante. De cualquier manera, los interesados pueden ver la nota completa en: http://www.secyt.unc.edu.ar/Nuevo/portada_contenido.php?idNota=255

La entrevista fue titulada:

La ciencia en la Argentina nace con una variable muy fuerte de imperialismo cultural

- Al margen de la Campaña del Desierto y del rol que cumplieron allí los científicos, el gobierno de Sarmiento es el que impone la institucionalización a través del Observatorio Astronómico y las Academias de Ciencias…en ese momento se formula un proyecto. ¿Qué lo caracteriza, hacia dónde se apunta?

- Con Sarmiento, la ciencia empieza a institucionalizarse con un componente simbólico muy alto. Las elites políticas argentinas consideran que un país civilizado tiene que tener ciencia. Pero claro, los países avanzados consideran que la ciencia tiene que tener un rol utilitario muy importante. Este es un juego que yo todavía estoy tratando de entender. En la Argentina el proceso comienza con un componente puramente simbólico, porque si hubiéramos pensado en una ciencia de carácter utilitario, si Sarmiento hubiera pensado en la utilidad económica probablemente no hubiera comenzado con el Observatorio, no habría empezado por mirar el cielo, más allá de que la Astronomía juega un rol importante. Hubiera promovido otros aspectos, que de hecho lo hizo pero no con la misma intensidad. Este yo creo que es un componente simbólico muy importante. Quince, veinte años después ya se transformó, y ves que se construyó un instituto Geográfico, el Observatorio de la Plata, que tienen objetivos muy concretos destinados a la Marina. Entonces, al componente simbólico se le agrega rápidamente un componente utilitario. Es decir, la producción de conocimiento científico desde la Astronomía, la Geografía, necesario para la construcción del Estado.

- En otras palabras, no se pensaba en términos de ciencia utilitaria y ciencia “pura”…

- Si, claramente. Pero además, si uno estudia el caso del ideal de Sarmiento alrededor el Observatorio y que contrata a Benjamin Gould para dirigirlo, puede advertir que el proyecto fue un fracaso, porque se va a tardar más de 60 años en que el Observatorio quede en manos de astrónomos argentinos. Cuando uno va a ver cómo se institucionaliza la Astronomía en otros países de América Latina, todos padecen esta misma debilidad. Lo que se esperaba que iba a florecer no de manera inmediata, pero sí en un plazo de 20 años, que Gould iba a formar científicos argentinos, no ocurrió. Y esto tiene que ver con los intereses de extranjeros que se instalan en un país que no es el suyo, donde no se insertan en una tradición de producción y legitimación, porque la ciencia se mueve mucho de valores, ¿vos querés ganar el premio Nobel o querés hacer un aporte a la ciencia argentina?. Si vos querés ganar el premio nobel probablemente te convenga migrar o trabajar muy en contacto con científicos de EE.UU. y Europa, y sí es así, seguramente tu agenda de trabajo e investigación no va a responder a las políticas de ciencia y tecnología de nuestro país. Es decir, estas buscando la legitimación de la comunidad científica internacional. Esto Sarmiento no lo tiene muy presente. Y lo que hoy nos damos cuenta es que América Latina tiene que crear mecanismos de legitimación propia. Es decir, un premio Nobel latinoamericano que los científicos quieran ganar y no por trabajar en temas de punta sino por lo que se supone que para América Latina es relevante. Ahora ¿Quién va a definir lo que para América Latina es relevante? Allí aparece todo el trabajo que nos falta.

- Volviendo a Sarmiento, ¿qué elementos se pueden identificar a nivel cultural de esta época que llevaron a pensar la ciencia desde esta forma puramente simbólica?

- Lo que funciona en Sarmiento y sus contemporáneos, es el mito compartido en toda América Latina de la ciencia como un gran proceso internacional de colaboración. Uno diría hoy que es una mirada ingenua, donde se supone que va a venir un científico norteamericano y va a ayudar a formar científicos argentinos, astrónomos argentinos. Y eso no va a ocurrir. Porque la ciencia en EE.UU ya está muy evolucionada, se juegan intereses pesados, importantes. Benjamin Gould viene para seguir ganando prestigio como astrónomo norteamericano, lo mismo va a pasar con los naturalistas que Sarmiento trae para la Academia Nacional de Ciencias acá a Córdoba. Va a ser algo de lo que van a adolecer los países que vienen de la colonia: un juego de ingenuidad e ideología heredada, que los hace pensar que la ciencia es una gran empresa internacional, altruista, compartida, donde todos buscamos conocimiento por el bien de la humanidad. Esta retórica está presente en todo el siglo XIX, y también la comparten los científicos norteamericanos, pero los norteamericanos tienen políticos que entienden que eso es una “cascarita” retórica. Por eso te corres 100 años más tarde y ves el proyecto Manhattan, que fue secreto, para terminar con una guerra, para terminar de consolidad la hegemonía de una potencia. Entonces te preguntas ¿dónde está el internacionalismo y la actitud altruista de la ciencia?.

- Una mirada ingenua, que es propia de un país dependiente culturalmente…

- Exactamente, aunque yo no me hubiera animado a decirlo en esos términos, pero me cuesta entender por qué esta mal decirlo así. Pero yo creo que es así. Tal vez, yo que soy historiador, debería decirlo de manera más matizada, pero creo que hoy hay elementos para pensar que, efectivamente, la ciencia en Argentina nace con una variable muy fuerte de imperialismo cultural. Sé que este es un elemento chocante, donde hay que argumentar mucho. Pero hay indicios claros, como esto que te comento, la ideología del internacionalismo, la Astronomía del siglo XIX, la ciencia paradigmática, el mito de que los datos se comparten.
Todo es una ingenuidad, que es comprensible, porque Sarmiento no era tonto, es el contexto que lo lleva a pensar de esa manera. Nosotros en ese contexto pensaríamos igual que Sarmiento. Es muy difícil trascender esa época.

- Además de la referencia al Observatorio Astronómico, esto que llamás imperialismo cultural ¿lo podés ver en otros casos concretos, ejemplificadores, dentro del campo científico?

- Otro ejemplo es el caso del Observatorio de La Plata, que es dirigido por un astrónomo francés contratado especialmente. Y el Observatorio se suma al programa de investigación de la Astronomía francesa, liderado por la Marina francesa. Ahí uno ve el imperialismo cultural. Hay otro ejemplo clarísimo, que es el Instituto de Física de La Plata. Cuando se crea la Universidad Nacional de La Plata en 1905 bajo el concepto de “Universidad Científica” tomando el modelo de las Universidades anglosajonas, se crea el Instituto de Física y como no tenemos físicos en Argentina se trata de traer los mejores físicos que se puedan y como en ese momento Argentina era un país relativamente rico, se dio el lujo de traer físicos alemanes de primera línea. De pronto en 1912 en Argentina, había un Centro de Física Alemana fuera de Alemania. Ahora, esto respondió a una política de expansionismo cultural del gobierno alemán, está muy claro. El gobierno alemán favorece, a través del Instituto argentino germano, que se instale un grupo de físicos alemanes, pero por una cuestión que Alemania está interesada en avanzar en términos culturales y todos sabemos que dentro del capitalismo avanzar culturalmente es avanzar a posteriori y en un sentido económico, se va detrás de la búsqueda de mercados. Esto es una estrategia de los países europeos y de EE.UU ya a comienzos del siglo XX. El caso del Instituto de Física de la Plata está estudiado por el historiador Lewis Pyenson como un caso de imperialismo cultural.

- Lo cierto es que la ciencia no puede desarrollarse al margen de la política. En el siglo XIX, la Argentina definió un perfil científico dentro de un proyecto de Nación determinado. ¿Qué alcances tuvo ese proyecto?

- Creo que en esa época se cristalizan muchas cosas importantes, que va a llegar hasta la década del 40, que van a definir líneas de trabajo, de investigación, poco dinamismo en algunas áreas, por haber definido una economía agroexportadora.
Un puede comparar la Argentina con el caso de EE.UU y preguntarse ¿qué es lo que hace que EE.UU tenga tan tempranamente una ciencia tan dinámica? Y creo que tiene mucho que ver con un perfil económico que define la clase política norteamericana, pero ya en el siglo XVIII, en la independencia, en 1776. Uno vé 20 o 30 años después una cultura política vinculada al desarrollo científico que es difícil de entender. Al estudiarla, te das cuenta rápido: se definió el perfil productivo del país.

- La Argentina no pudo definir un perfil…

- Nuestro problema, desde mi punto de vista, es que este perfil lo definimos y redefinimos muchas veces. Tuvimos momentos de definición muy clara. Yo rescato el segundo Plan Quinquenal del Gobierno de Perón, que creo que fue un logro nacional, no fue un logro del peronismo. Porque Perón quiere planificar la economía porque los países avanzados planifican su economía, no hay ningún país desarrollado que no lo haga. De hecho las grandes burocracias estatales llegan a entender que necesitan de las ciencias sociales. Uno ve que en el segundo Plan Quinquenal- repito, a mi no me importa quién lo hizo- hay una política para la ciencia y la tecnología. Esto para América Latina fue un hito. Que fue borrado, tres años más tarde. Aunque el peronismo llevó adelante varias líneas de ese plan, como la tecnología aeronáutica, el desarrollo de tecnología nuclear. ¿Y por qué fue borrado? Porque una Dictadura decidió que había que limpiar con esos diez años de “tiranía”; una “tiranía” que había surgido del voto popular. No fueron diez años de logros peronistas, muchas cosas venían de antes. Fue un logro del peronismo, de diez años de la comunidad científica y sistema de avanzada, de militares industrialistas como Mosconi, de la creación de YPF, etc. Cuando se borraron los diez años del peronismo, en realidad se borraron 50 años de historia. Esto fue tremendo en términos de la construcción de un país que quiere tener ciencia y tecnología. Y a partir de ahí se empezó otra historia desde cero, la capacidad planificadora de las dictaduras fue nula, entonces ahí se cristaliza el sistema científico tecnológico, el INTI por un lado, el INTA por el otro, las Universidades por otro, el Conicet que apoya a las Universidades. ¿Pero cómo generamos algo conjunto?. Se reunían todas las instituciones y se repartían fondos. Bueno, yo creo que sobre el daño que produjo la Revolución Libertadora de 1955 todavía no somos muy concientes. Se cancelaron instituciones, la CNEA (Comisión Nacional de Energía Atómica) se reorganizó, había cosas muy interesantes que fueron borradas del mapa. Aunque creo que lo más importante que se perdió fue la competencia política para formular políticas de ciencia y tecnología.

- ¿Qué ocurre mientras tanto en los países desarrollados, cómo se genera el proceso de desarrollo de las instituciones científicas?

- En general, en países como Francia, Estados Unidos o en menor medida en Italia y España, la Instituciones crecen por procesos de diferenciación. Por ejemplo en el siglo XVII nacen las academias científicas, porque las Universidades tienen tradición escolástica, y de las Academias se desprenden Observatorios, los Jardines Botánicos. Pero esta fragmentación requiere luego de políticas para la integración. Los ciclos de maduración institucional se pueden resumir en procesos de fragmentación e integración, diferenciación e integración. Un país crea un modelo, como la universidad Humboldtiana, y fue un modelo exitosísimo, que fue llevado a Inglaterra, Estados Unidos. Una Universidad que investiga. Y eso nació en Alemania, no vino en la tabla de Moisés. Las Universidades antes eran otras cosas. Hasta el siglo XVIII y a partir del siglo XIX un modelo producido por un contexto y unas circunstancias determinadas que va a ser tan exitoso que todos los países lo van a empezar a copiar. Y en el siglo XIX también se produce otro hito, se produce el vínculo entre industria y Universidad. Que ocurre otra vez en Alemania y parcialmente en Inglaterra, a través de la química y el electromagnetismo. Uno puede ver que a fines del siglo XIX nacen los laboratorios industriales. Los laboratorios en todo el ecosistema de instituciones fueron un eslabón importantísimo (porque la ciencia son instituciones, no nace en el vacío. La ciencia es un sistema que necesita gente que administre, gente que se dedique a difundir, gente que se dedique a diferentes áreas y disciplinas).


- ¿Qué sucedió en la Argentina con la creación de Laboratorios industriales?

- En el proceso de desarrollo en Argentina no se lograron crear laboratorios industriales. Pero lo interesante es escuchar a Einardi, a Gaviola, a Galoni, al ingeniero Dureti, durante la década del treinta y cuarenta, cuando escribían muchos trabajos pidiendo, a los gritos, que en la Argentina se desarrollen laboratorios industriales. Le decían a los empresarios y a los gobiernos que necesitábamos producir conocimiento para ser competitivos, que todavía estábamos en la época de la copia, y que las empresas argentinas nunca van a ser competitivas si siguen copiando. “Ustedes tienen que invertir en investigación científica- reclamaban-, queremos, los físicos, trabajar con ustedes. !!Hay que hacer Laboratorios!!”. Esto nunca ocurre. Y tiene que ver con prácticas culturales, hábitos empresariales. El empresariado argentino se concibió siempre como un sector poco dinámico y a la sombra del sector agroexportador, pero fue el lugar que se dio a sí mismo y siempre buscó la protección del Estado, siempre evadió los riesgos. Nada que ver con el empresario europeo, el emprendedor que se creó en torno de la innovación tecnológica. La Unión Industrial Argentina no respondía a esos rasgos, claramente.

- Ya pasaron 200 años de historia nacional y científica, ¿Qué se puede aprender del pasado y de estos proyectos inconclusos de cara al futuro?

- Nosotros, desde la UNSAM, estamos trabajando para tratar de entender los procesos del desarrollo científico tecnológicos de la Argentina en el escenario mundial. Somos un país periférico al que se le asignó un rol secundario en un sistema mundial estratificado, fuertemente jerárquico, que le asigna a la Argentina, repito, un rol de productor de productos primarios. Creemos que la Argentina debe tener políticas para el desarrollo científico tecnológico que logren confrontar con ese lugar en este sistema de poder mundial, pero ya no para Argentina, sino para América Latina, porque esto va a ocurrir en América Latina o no va a ocurrir. Hay que pensar en términos regionales, pero esto debe empezar por Brasil y Argentina, y ya está empezando sobre todo en Brasil, seguido por Argentina. Por ejemplo, un país productor de tecnología de punta donde su exportación se caracterice no por la soja transgénica, sino por satélites, reactores nucleares, microelectrónica. Esto es hacer cambiar el perfil productivo, pero para lograrlo creo que hay que entender estos procesos históricos.

- Una manera de entenderlo es comprendiendo que la manera de la que se ingresó fue desde un rol dependiente, a partir de la elección del modelo económico agroexportador, que no le convenía…

- Claro. Hoy creo que estamos entendiendo el problema desde el punto de vista del sector científico. Creo que hay una comunidad científica que empieza a ser sensible a estas cosas. Esto quiere decir que, por ejemplo, cuando el CONICET te evalúa como investigador y te pregunta ¿usted tiene vínculos internacionales? Sí, con científicos de Harvard: “listo”, estás aprobado. Pero no te preguntan ¿en qué? ¿Está bien a priori tener vínculos con Harvard? Esto es dependencia cultural, pero creo que se está empezando a criticar. Y si nosotros mandamos a investigadores a capacitarse en una línea y hoy tenemos poca gente en esa área, se la envía para que se capacite y vuelva. Eso es tener una política científica.

lunes, 2 de agosto de 2010

Carta Abierta - Audiencia - Raro - H. Berretta

CARTA ABIERTA

Política de Medicamentos

2º FORO para la elaboración de

POLÍTICAS PÚBLICAS de SALUD

Para analizar juntos qué Sistema de Salud tenemos,

Para pensar juntos qué Sistema de Salud queremos

y para empezar a construir colectivamente un Proyecto de Salud.

1. Demanda pública de medicamentos

2. Estado de situación de los laboratorios de producción pública

3. Actividades de coordinación (existentes y potenciales) entre las distintas unidades de producción

4. Líneas productivas prioritarias y estratégicas.

5. El mercado internacional de medicamentos. Límites y posibilidades

Para ello invitamos a algunos de los protagonistas indispensables.

A tratar:

ROL DEL ESTADO EN LAS POLÍTICAS DE MEDICAMENTOS

POLÍTICAS DE MEDICAMENTOS DESDE LA INVESTIGACIÓN

POLÍTICAS DE MEDICAMENTOS. IMPORTANCIA DE UN ORGANISMO ESTATAL DE REGULACIÓN

POLÍTICAS DE MEDICAMENTOS DESDE LA PRODUCCIÓN Y EL MERCADO

POLÍTICAS DE MEDICAMENTOS DESDE LA PRODUCCIÓN PÚBLICA

Con la decisión de incidir con fuerza en el debate político de cara al 2011.

Convoca y Organiza: ESPACIO CARTA ABIERTA (www.cartaabierta.org.ar ).

Viernes 13 de agosto de 2010 - a las 17:45 hs - Biblioteca Nacional / Sala J.L. Borges. Comienzo puntual 18:00 hs. Los esperamos.

AUDIENCIA PÚBLICA

Los diputados Eduardo Macaluse y Graciela Iturraspe (SÍ-Unidad Popular), Claudio Lozano (Buenos Aires para Todos), Mónica Fein (PS de Santa Fe) y Virginia Linares (GEN) invitamos a debatir sobre Producción Pública de Medicamentos.

Convocamos a esta Audiencia Pública a los profesionales de Laboratorios de PPM, habilitados o no, para discutir sobre la situación actual en que se encuentran. Invitamos a investigadores, a trabajadores de la Salud y a usuarios del Sistema Público de Salud. La agenda es:

1.- Apertura por parte de los diputados

2.- Presentación gremial sobre el tema

3.- Presentación por parte de profesionales de la investigación y de Laboratorios de PPM

4.- Debate y Propuestas

Jueves 12 de agosto - 14.30 a 19 hs., Piso 2º, Sala 1, Anexo del Congreso de la Nación, Rio Bamba 25, CABA.

RARO

En la gacetilla anterior mencionábamos que durante el Gobierno actual, las acciones de la ex ministra de Salud Graciela Ocaña, de la ministra de Defensa Nilda Garré y, recientemente, de la Presidenta de la Nación al entregar un subsidio al Biológico de La Plata y lo que dijo en la cena de las FFAA, hacían pensar que todo estaba encaminado para continuar con la Producción Pública de Medicamentos (PPM). Además, la Dra Cristina Fernández de Kirchner incorporaba al ministro de Ciencia y Tecnología Lino Barañao a ese accionar. Ver en: http://grupogestionpoliticas.blogspot.com/2010/07/cfk-garre-baranao-manzur.html .

También mencionábamos que teníamos dudas en relación a la actitud del ministro de Salud Juan Manzur porque no veíamos que actuara en consonancia con los otros Ministros y la Presidenta. Ver en: http://grupogestionpoliticas.blogspot.com/2010/06/30-preguntas-al-dr-manzur-reflexiones.html .

Pero, por otra parte, el Dr Manzur es un actor importante porque el ministerio de Salud es el gran demandante de medicamentos.

Resulta entonces muy raro ver acciones opuestas en la misma gestión de Gobierno y al más alto nivel político. Más, teniendo en cuenta que la decisión de impulsar la PPM se hizo a través de la Resol. Nº 286/2008 del Ministerio de Salud y, además, fue calificado como proyecto estratégico por el mismo Gobierno.

Ante estas contradicciones, vamos a intentar establecer contactos con algunas personas cercanas al poder político, para ver si nos pueden dar alguna información, o hacer alguna aclaración, acerca de la paralización de los Laboratorios de Producción Pública de Medicamentos como abastecedores del plan Remediar, hospitales, etc.

Porque de consolidarse la posición del ministro Manzur, esto significará abastecer de medicamentos a los planes sociales a través de la compra, y con endeudamiento externo (BID).

Y si esta es la política que va a predominar, las consecuencias de no utilizar la capacidad del Estado serán nefastas, porque quedaremos sin ninguna posibilidad de hacer investigación y desarrollo (I+D), en el ámbito público en el área de medicamentos.

Porque el sector privado que tanto se promueve no va a hacer I+D para resolver necesidades sociales, sólo busca la rentabilidad. Además, la inmensa mayoría de esos laboratorios -más de 200- que tanto apoya el ministro Manzur, no hacen ningún tipo de investigación, sólo negocios.

En síntesis, la misma metodología que implementó el ex ministro de Salud Ginés González García. Esto es, un proyecto estratégico sustentado sobre una base mercantilista. Obviamente, un error conceptual.

Porque se puede apoyar y beneficiar al sector privado, eso que tanto quieren y buscan por todos los medios, pero lo que no puede ser es que el sector privado se constituya en el eje de una política pública estratégica.

HORACIO BERRETTA

Lamentamos informar que el 7 de julio de 2010, falleció en Córdoba, el Arquitecto Horacio Berretta.

El Arq. Berretta fue el fundador y primer director del Centro Experimental de la Vivienda Económica -CEVE/Conicet-, institución a través de la cual siempre buscó dar soluciones para la construcción de viviendas económicas con tecnología de avanzada a bajo costo.

Él, junto al equipo de investigadores de ese centro, desarrollaron nuevos materiales de construcción económicos, de fabricación simple a cargo de pequeñas empresas comunitarias y cooperativas de los propios usuarios, con maquinarias y herramientas de bajo costo, mano de obra intensiva, escaso uso de capital, fácil difusión y simple aprendizaje para su fabricación y aplicación.

Como un ejemplo de los temas a los que se dedicaba, está el relacionado con el estudio de materiales de construcción sustentables, partiendo de la utilización de desechos agroindustriales y urbanos, del reciclado de cáscaras de maní y envases de PET, con aplicación a componentes de construcción de viviendas.

Además, en 1973 fundó la Asociación de Vivienda Económica (AVE http://www.ave.org.ar/ ), una asociación civil sin fines de lucro, con similares objetivos.

Tuvimos contactos con él, y en dos o tres oportunidades difundimos artículos suyos. Uno de ellos fue en noviembre de 2006: “Ciencia, Técnica y Compromiso”, que vale la pena leerlo por los conceptos que ahí expresa sobre CyT en donde, además, refleja su pensamiento humanísta: http://grupogestionpoliticas.blogspot.com/2006/11/artculo-para-reflexionar.html .

Por otra parte, en distintas oportunidades hemos manifestado en nuestras gacetillas que uno de los proyectos estratégicos que se deberían desarrollar a nivel nacional era el de viviendas económicas , como una manera más de transferir el conocimiento a la sociedad. La razón de ello era porque conocíamos que detrás de estos temas fundamentales estaba todo el potencial del CEVE, y del Arq. Berretta.

Fue un pionero y un referente a nivel nacional y latinoamericano en el estudio de materiales para la construcción de viviendas económicas y una persona comprometida, que no concebía que no se utilizara el conocimiento disponible para la solución de problemas acuciantes. Todo un ejemplo de científico/ tecnólogo con compromiso social.

Por eso nuestro pesar, y este muy modesto recordatorio.

Si Ud también quiere rendirle un pequeño homenaje al Arq. Berretta, visite el CEVE, el instituto que fundó y dirigió, y se sorprenderá con lo que hace una institución que hoy nos enorgullece a todos: http://www.ceve.org.ar/ .

Este texto se difunde a: Presidencia de la Nación, Jefatura de Gabinete, Ministerios de Educación, Salud, Defensa, Cancillería, Ciencia y Tecnología, Ministerios de Salud Provinciales, ANMAT, Diputados y Senadores Nacionales, Legisladores y Funcionarios Provinciales y C.A.B.A., Academias Nacionales, Instituciones del Sector CyT (INTA, INTI, CNEA, CONICET, SEGEMAR, CONAE, CITEFA, INIDEP, SENASA, INA, ANLIS-Malbrán, UTN), Facultades de Universidades Nacionales, ONG, Laboratorios de PPMV, etc).